Así que conocerlas -dichas características y esas formas que acompañan de forma única al movimiento del cuerpo- es la verdadera clave para saber elegir no solo esas prendas que no se peguen a la piel y esas que transpiren -evitando indeseadas marcas de sudor-, sino también esas que formarán el conjunto idóneo para cada ocasión y sumarán puntos en tu fondo de armario. Un elastómero sintético y proveniente del petróleo que llegó al mercado en los años 50 y que hoy es uno de los más utilizados, especialmente en la fabricación de ropa técnica.