Tras una final de infarto en la que el club perdió la liga alemana en la última jornada al necesitar sí o sí una victoria en casa para ponerse por delante del Bayern, el Borussia Dortmund intentará de nuevo acabar con la hegemonía de su gran rival histórico. La trascendencia mundial que adquirieron tanto el propio jugador como el club donde se desempeñaba como profesional no han tenido parangón en la historia del fútbol argentino.