Eliminado en octavos de final, Uruguay finaliza su participación en el Mundial dejando una imagen polémica, con la mordida de Suárez, la ausencia de alternativas ante su suspensión, el nivel disminuyente de sus figuras que habían brillado años atrás, y la falta de recambio generacional que siembra dudas de cara al futuro. Contando aún con la base del equipo que había quedado tercero en la Sudamericana, Vivas realizó una campaña pésima, reuniendo apenas 13 puntos en 15 fechas, con la particularidad de haber perdido una buena cantidad de partidos en los últimos diez minutos de juego.